Viendo las tendencias de decoración en cuanto a estilo nórdico/escandinavo se refiere, me han entrado unas ganas irrefrenables de customizar accesorios de decoración en casa.
Ya lo hice recientemente con los tarros de cristal y ahora le toca el turno a los cojines.
El pelo y las texturas suaves se trasladan de la moda de calle a las tendencias de interior. Y con las temperaturas actuales apetece más que nunca lograr espacios acogedores y cálidos en casa.
Como siempre, pongo sobre la mesa diferentes materiales para realizar pruebas de colores y texturas para conseguir el resultado que más encaje con la idea.
Antes de coser o pegar siempre realizo pruebas jugando con diferentes materiales; cintas, lanas,... que tengo en casa.
Suelo hacer los dibujos yo misma, pero si no se os da bien, podéis encontrar plantillas o siluetas en internet.
Tengo otros diseños en mente, pero para este en concreto he decidido no recargarlo mucho y adornarlo con simples detalles.
En esta ocasión he elegido fieltro marrón oscuro para mayor contraste con la funda del cojín.
Al final me he decidido por el pompon como tocado en la cabeza, así que he hecho borlas con la misma lana para las 4 esquinas del cojín.
Cómo podéis ver, en lugar de usar colores que resalten, he usados colores de la misma gama del sofá para que se integre perfectamente con el resto de cojines.
Saludos,
Carme
